Somos un grupo de estudiantes del establecimiento Presbítero José Bonoris de Colonia Caroya, actualmente estamos cursando sexto año de la especialidad economía y nuestra profesora Marina Zanier nos comentó sobre el concurso de “Aprender a emprender”. Entre compañeras y compañeros decidimos sumarnos creando un emprendimiento basado en la elaboración de huertas orgánicas en cajones de madera. Nuestro objetivo es facilitar y orientar a las personas en este camino, con el fin de adquirir sus propios alimentos.
Decidimos hacer este proyecto ya que nos parece muy importante que las personas retomen la práctica de una huerta orgánica en casa y que se comprometan a una alimentación más sana.
Dicho proyecto surgió, además, por la importancia y los beneficios que éste ofrece. Es decir, las huertas orgánicas, son la forma de preservar lo natural de los alimentos, así como el cuidado y la prevención del deterioro de los suelos, la reducción de inundaciones, la preservación del medio ambiente, la forma de reciclar al hacer compost, la cercanía a la naturaleza y sus procesos.
En el ámbito personal, el hecho de tener contacto con la tierra crea un estado de bienestar, manteniendo ocupada la mente y recargando energías de una manera muy sencilla y natural, ayudando a reducir el estrés y la ansiedad.
Con este proyecto, queremos transmitir algo que trascienda el hecho en sí de tener una huerta, es decir, reconectar con la tierra, nuestros ancestros, la naturaleza, la alimentación saludable y lo ecológico.
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